domingo, 15 de julio de 2012

Astrum Draconis

   Aquí os presento una historia que acabo de rescatar de una carpeta olvidada en el disco duro de mi ordenador. La escribí para Inglés, pero os la traigo en español. Espero que os guste


“ Astrum Draconis”

Como todos los días, se despertó y se lavó la cara en el río. Después se vistió y salió a cazar con su arco y sus flechas. Mientras caminaba, atento a todos los sonidos del bosque, empezó a pensar sobre su vida. Por varias circunstancias, vivía en ese bosque desde hacía tres años. Él sentía cómo pasaba el tiempo a su alrededor, los días, los meses, las estaciones...
De repente, un batir de alas le apartó de sus pensamientos. Una sombra inmensa tapó el sol y cubrió el suelo. Él, intrigado, miró hacia atrás mientras corría. El miedo le hizo pararse. Sorprendentemente, era un dragón azul celeste. Los animales del bosque corrieron asustados mientras el ser mitológico volaba entre las nubes.
Aterrorizado, huyó de la bestia, creyendo que sería su próxima comida.
–“Ven, ayúdame, por favor”  –decía una voz.
Él sabía que los dragones engañaban a sus víctimas hablando con ellas, así que corrió mientras la criatura le observaba desde el cielo. Sintió que el animal descendía y, antes de que éste pudiera comerle, cogió una flecha y apuntó mientras disparaba. Por casualidad, o por acción del destino, la flecha alcanzó la boca del dragón, atravesando su paladar. El ser cayó hacia el suelo, muerto.
Se acercó a la bestia, orgulloso de su captura. Pero ya no estaba. En su lugar, había una bella mujer. Vestía una túnica blanca. Su pelo era dorado como el sol, y brillaba con la luz. Toda su belleza estaba rota por la sangre que manchaba su cuerpo.
No sabía lo que había sucedido. Todo era tan confuso... ¿dónde estaba
el dragón? ¿Quién era esta mujer? Estaba intentado encontrar alguna respuesta, cuando volvió a escuchar la misma voz:
–Yo soy esa mujer, y también soy el dragón que mataste. Era una noble que estaba embrujada y te pedí ayuda. Si me hubieras ayudado, te habría recompensado con riquezas y con mi mano en matrimonio. Pero tú decidiste que mi vida acabara. Como castigo, tú recibirás la misma maldición que yo.
De repente, sintió que aumentaba de tamaño, mientras su cuerpo se transformó en el de un dragón. Creyendo que la gente intentaría matarlo, como él lo había echo con la mujer-dragón, huyó. Sabía que en ningún lugar de la Tierra estaría a salvo así que voló hacia el cielo. Por el día, dormía en una nube, para que los rayos del sol no le dañaran. Por la noche, ascendía para llegar a las estrellas. Los dioses, viendo que tardaría siglos en llegar hasta el firmamento, decidieron elevarlo ellos mismos. Así que, mientras él dormía, ellos lo tomaron en su seno y le colocaron entre las estrellas.
Desde entonces y cada noche, se puede ver al dragón girando en torno a la Estrella Polar, intentando huir de la tierra. Intentando huir de nosotros.

  

1 comentario:

  1. Supongo que no tengo que decir quién soy, así que al grano:
    Me ha gustado mucho la historia, el título es genial. El final de esta historia es lo que yo denomino "sentencia final" (es decir, que me ha encantado)

    Me despido por hoy, mi planeta me reclama

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